Alta mar
La
tarde está tranquila
Ha
llegado al momento ya,
De
repente una ola anuncia
La
furia, el desdén,
Solo
seguir la corriente advierte el
Un
barco pequeño
De
pescadores, pretende,
Salir
navegando…
Un
marino paciente
Logra
persuadir la turbulencia
Alta
mar impaciente
Sin
pensar antes de actuar
Alta mar narcisista
Que
deseas todo controlar.
Aún
así navego en tus aguas
Esperando
lograr
Que
la furia de tus costas
Terminen
en un pacifico mar.
6 comentarios:
A mi me ha dado la sensación de un interior convulso y caótico queriendo ser gobernado por una serenidad de ánimo que no consigue y que anhela profundamente. ¿Lo habrá conseguido?
Zoraida, El detalle es conseguir la serenidad, que aveces es difícil encontrar
Nosotras las personas somos tenaces navegantes en este mar turbulento llamado "vida". Superamos constantemente salvajes olas, y con determinación, llegamos al tan esperado sosiego.
Este se ha vuelto uno de mis textos favoritos. Espero el próximo.
Saludos!
Aunque aveces es dificil encontrar la quietud, sobretodo aquellos que somos tranquilos como el agua de un estanque, pero cuando se colma la virtud explosivos e intensos como un volcan en erupción.
Saludos Nikonee.
Despues de la tempestad viene la calma, y en la turbulencia de nuestro mar agitado que es la vida siempre esperamos encontrar la calma al final del camino.
Excelentes versos estimado Morbid. Muy bueno.
Saludos.
Gracias Chogüi. Saludos
P.D. Buscaré tu nuevo blog
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